miércoles, 23 de septiembre de 2015

IGLESIAS FORTIFICADAS DE TRANSILVANIA, RUMANIA

Transilvania, siempre mal asociada a la leyenda de Drácula, es una rica región con imponentes castillos, bellos paisajes y altas montañas, ciudades con gran riqueza cultural, pueblos con increíbles iglesias de madera y también pueblos con iglesias fortificadas.
Hay muchas localidades con este tipo de iglesias y algunas son Patrimonio de la Humanidad.

A mediados del siglo XII llegó la colonización sajona, población de origen alemán que se instaló alrededor de Sibiu. Estos colonos protegían las frontera oriental húngara al igual que los caballeros de la Orden Teutónica controlaban los Cárpatos.

Esta región, amenazada siempre por otomanos y tártaros, hubieron de organizarse de tal manera que sus sistemas defensivos fueran eficaces ante los ataques. Los pueblos se fortificaron, se organizaron alrededor de la iglesia que ocupaba la posición central y mas alta del pueblo. A la iglesia se le añadieron torres defensivas, graneros y múltiples estancias para dar cobijo a esta comunidad de agricultores, artesanos y mercaderes. 

Nosotros llegamos a Rumanía en nuestro propio coche pero, si queréis visitar este singular país, la mejor opción es, sin lugar a dudas, el avión. Muchas son las aldeas y pueblos con recintos fortificados; nosotros vimos sólo una pequeña muestra de todos ellos aunque, quizás, sean los más representativos.

1. PREJMER. Este pueblo se encuentra situado a menos de 30 km al nordeste de Brasov. . Declarada Patrimonio de la Humanidad. Su fortaleza campesina es la más completa y mejor conservada de Transilvania. 

La barbacana del patio de la entrada nos lleva hasta la muralla interior de 14 metros de altura y casi 6 metros de espesor.


Los cuatro pisos de altura y 272 habitaciones daban cobijo a la población en caso de ataque y también servían de almacén de alimentos durante los asedios. La iglesia siempre se halla en el centro de la muralla. Realmente es una fortaleza espectacular.