martes, 24 de enero de 2012

FIN DE SEMANA EN PARIS 2011

Una escapada fugaz a Paris siempre es interesante, especialmente si se encuentra un vuelo barato como ha sido este caso. Hemos visitado la ciudad en varias ocasiones y los monumentos y museos más emblemáticos ya los hemos visto; por este motivo en este viaje hemos querido ver otras cosas aunque, claro está, siempre se repiten barrios. Paris es pasear, pasear y pasear y siempre se descubren rincones y zonas especiales.

SABADO, 15-10-2011

A las 6.15 cerramos la puerta de casa y nos vamos al aeropuerto de el Prat para coger el avion de Rynair destino: ciudad de la luz.
Llegamos a Paris Beauvais a las 10.20. El aeropuerto está situado a 80 km al norte de Paris, casi nada!
Compramos los tiquets del bus que nos cuestan 15 euros por persona y trayecto. La duración del viaje depende del tráfico que se encuentre. Nosotros hemos estado 1, 15 minutos hasta Porte Maillot (el autobus para frente al Palais des Congrès).
Tenemos el alojamiento cerca de aquí y en un momento estamos ante el hotel L'Adresse. Aunque es un hotel que tiene buenas críticas, a mi no me ha gustado. Aún ser un hotel de diseño, le he encontrado bastantes pegas: las habitaciones son enanas, el desayuno escasísimo, hotel claustrofóbico acentuado por el color negro dominante, el ascensor ridículo, parece un montacargas....en fin, suerte que hemos pillamos una oferta pero, aún así, es un hotel muy caro por lo que te ofrecen.
Dejamos las maletas en la habitación y aprovechamos que hay una máquina de Nespresso para hacernos un café; luego, vamos hacia el metro Porte de Maillot. Compramos un abono de 10 viajes (12.50 euros) y nos bajamos en Place Blanche, parada de metro situada a los pies de la colina de Montmartre y que junto a la cercana place Pigalle constituyen el centro del Montmartre nocturno. En la place Blanche se alza el Moulin-Rouge, el famoso cabaret asociado a la memoria y la obra del pintor Toulose-Lautrec.
A lo largo del boulevard de Clichy se suceden, hasta la place Pigalle, cines, cervecerias y sex-shops que se encuentran muy animados, sobre todo por la noche.
Hacemos un alto para comer y continuamos hasta la plaza Rictus donde se encuentra el muro de los "Te amo". En la pared, cubierta de azulejos de color azul, estan escritas 1000 frases en más de 300 idiomas que todas dicen lo mismo: Te amo.
El muro tiene incluso una pagina web, le mur des je t'aime y aunque no es espectacular, si que es un lugar curioso de ver.
Vamos subiendo la colina...
...hasta llegar a la Pace du Tertre. Esta plaza arbolada es el corazón de Montmartre. La zona que rodea a la plaza es la que más fielmente ha mantenido el caracter del viejo Montmartre. Jóvenes y no tan jóvenes pintores muestran sus obras en esta plaza siempre abarrotada de gente.
La colina de Montmartre está dominada, sin lugar a dudas, por la basílica del Sacré-Coeur. Esta inmensa mole de piedra blanca se comenzó a construir en 1887 en un estilo románico bizantino que fue muy discutido. Está rematada por una enorme cúpula. El campanario tiene una de las campanas más grandes del mundo, la "Savoyarde" cuyo peso es, ni más ni menos, de 19 toneladas. Desde su terraza se puede ver una bonita vista de la ciudad siempre y cuando la enorme masa de gente te lo permita.
Bajamos la colina para llegar a la zona de los Grandes Bulevares y pasear entre pasajes y galerias cubiertas.
En su mayoría fueron construidos aproximadamente a principios del siglo XIX. Los pasajes y galerias cubiertas protegían a la población de las inclemencias del clima, muy frio en invierno. Pasear por estos callejones estrechos nos transporta al pasado mientras miramos las galerias de arte, tiendas de moda, bistrós refinados y curiosas librerias.
Pasamos por delante del imponente teatro de la Ópera
Aunque no nos sentamos en su terraza, pasamos por el mítico Café de la Paix. Uno de los cafés más famosos de Paris, sino el que más. Este café representa un trocito de la historia de la ciudad. En él se sentaron ilustres personajes y se organizaban importantes reuniones sociales.
Seguimos por el Boulevard hasta llegar a la Madeleine. Esta iglesia, dedicada a Maria Magdalena, está construida a semejanza de un templo griego. La construccion se realizaba de manera muy lenta y Napoleón en 1806 decidió tirar todo lo que se había levantado y construir un templo en honor de los soldados del Gran Ejército. Posteriormente, en 1814, el edificio fué destinado a iglesia.
Desde las escalinatas de la Madeleine se puede ver la Place de la Concorde
Otra plaza famosa es la Place Vendome, un gran cuadrilatero rodeado de importantes edificios y donde se encuentra el hotel Ritz, al cual intento entrar para ver los lujosos interiores pero, tan sólo al cruzar la puerta de entrada, un amable caballero me invita a volver a salir. La próxima vez no ire de incognito, me pondre la pegatina de "Chanel" en la frente y la de "Christian Dior" en los mofletes, seguro que así entraré!
En esta plaza tambien se encuentra la casa donde murió Chopin en 1849 y la casa donde vivió hasta su muerte , en 1894, la célebre condese de Castiglione, amante de Napoleon III y espia que, gracias a sus encantos y belleza, sacaba información de sus aristócratas amantes. Cuando su belleza se marchitó de forma prematura, fue olvidada por todos y, su caracter se volvió excéntrico, le valió el apodo de "la loca de la Place Vendome".
En el centro de la plaza se alza la Colonne Vendóme, de 44 metros de altura en honor de Napoleón I. Es una imitación de la Columna Trajana de Roma.
Nos acercamos a los jardines del Palais Royal, un remanso de paz en el centro de Paris. Tienen una longitud de 225 m y en su ornamentación se alternan tilos y olmos con estatuas.
Como de costumbre, siempre hay un momento para hacer el payaso.
La plaza del Forum de les Halles se encuentra en obras y una gran valla nos impide acceder a ella. Como ya lo habiamos visto en otras ocasiones, continuamos nuestro camino hacia el Centro Georges Pompidou.
Nos llama la atención una curiosa estación de metro.
El moderno edificio del Centro George Pompidou tiene cinco pisos y alberga entre otras cosas, el Museo Nacional de Arte Moderno. En la construcción solo se utilizó acero y vidrio y, escaleras, ascensores y pasillos, se encuentran en el exterior, mientras que el interior es un espacio abierto amplísimo. Realmente es un museo innovador en todos los sentidos y bien vale una visita.
Entre la iglesia de Saint Merri y el Georges Pompidou se encuentra la fuente dedicada a Stravinsky, adornada por varias esculturas móviles.
Es ya tarde y aprovechamos que hay un McDonald's para cenar. No nos gusta el ambiente de la zona y tenemos un pequeño problema con un chico que se pone delante de nosotros y nos impide el paso. Despues de un leve forcejeo, no pasa nada y con paso ligero continuamos nuestro camino para coger el metro y llegar rápido al hotel.

DOMINGO, 16-10-2011

Despues del desayuno, no demasiado abundante, salimos del hotel a las 10. Cogemos el metro de Porte Maillot hasta el cementerio de Père-Lachaise. Además de ser el cementerio más grande de Paris es tambien el más famoso debido a la cantidad de tumbas de hombres ilustres, escritores, músicos, pintores, científicos, filósofos o políticos, que reposan en su interior.
Algunas de las famosas tumbas que vemos:
Jim Morrison, controvertido cantante del grupo "The Doors"y consumidor de varios tipos de drogas que, en principio, le llevaron a la muerte a la edad de 27 años. Las malas lenguas dicen que no está muerto y que todo fue un montaje para alejarse del estrellato y fama en que estaba envuelto. Lo cierto es que su sencilla tumba, aun pasar desapercibida entre las demás, es visitada por muchísimos fans de su filosofia de vida.
Amedeo Modigliani, famoso pintor cuya vida tambien fue marcada por los excesos, tiene tambien una sencilla tumba.
Edith Piaf, gran cantante cuya vida, marcada por el infortunio, fue la causa de una muerte prematura
Oscar Wilde, dramaturgo irlandés que murió en la miseria, tiene una monumental y original tumba llena de escritos y besos de carmín.
Vemos el memorial a las victimas de la catastrofe aerea de Sharm el Sheikh, cuando el avión se precipitó sobre las aguas del Mar Rojo el 3 de enero del 2004.
Las tumbas de los dramaturgos y poetas: Moliere y La Fontaine
El gran pianista y compositor, Chopin
Y, por último, una tumba curiosa es la de un personaje llamado Yvan Salmon, apodado Victor Noir, periodista de la Marseillaise, asesinado por Pierre Bonaparte. Fue un periodista del períodico republicano La Marseillaise, que en 1870 fue asesinado por Pierre Bonaparte, sobrino de Napoleón III. Su estatua mortuoria revela la posición exacta de su muerte: pelo enmarañado, boca semiabierta y miembro viril en erección. Estas caracteristicas hicieron correr el rumor de que las mujeres con problemas para quedar embarazadas debian frotar algun miembo de su anatomia con el miembro erecto de Victor Noir. Es de imaginar que, despues de tanto frote, la estatua presenta unas zonas más lustrosas que otras. Las autoridades intentaron cercar la estátua pero, visto que las mujeres saltaban la reja y muchas se lesionaban, optaron por volverla a quitar. La estatua de Victor Noir es una de las más visitadas en el cementerio de Père-Lachaise.
Salimos del cementerio y cogemos el metro hasta la Plaza de la Bastilla
El nombre procede de la famosa y maciza fortaleza de la Bastilla. Convertida en prisión estatal fue el primer objetivo de la insurrección popular el 14 de julio de 1789. Fue tomada al asalto, liberados los presos, que eran sólo siete, debido a que la fortaleza iba a ser demolida, y su gobernador masacrado. En el plazo de un año quedó completamente arrasada. La plaza, urbanizada y transformada en 1803 por Napoleón fue escenario de sangrientos acontecimientos en 1848 y 1871. En el centro se alza la columna de Julliet, columna de 50.52 m de altura, construida en memoria de las victimas de la revolución de 1830, cuyos nombres aparecen inscritos en el fuste. Sus restos, junto con los de los caidos en la revolución de febrero de 1848, reposan en el basamento circular de mármol.
Hacemos unas fotos en la bonita Place des Vosgues: una amplia plaza cuadrada rodeada de edificios porticados, simetricos y uniformes. Conocida como "place Royale" se convirtió muy pronto en el centro de la vida elegante y mundana del Paris del siglo XVII.
Nos acercamos al museo Carnavalet dedicado a la historia de Paris, desde sus origenes hasta nuestros días.
El palacio tiene salas amuebladas
Y hasta una maqueta de una guillotina itinerante.
Empezamos a tener hambre y nos encontramos con un restaurante que se anuncia como español. Hemos comido una dorada, chipirones, pimientos de bacalao, vino y dos cafes y nos han soplado casi 50 euros. Aunque no ha estado mal, la comida tampoco era para tirar cohetes y, el precio, un poco alto. En fin, esto tambien es Paris.
Continuamos direccion a la Ile Saint Louis, un oasis de paz en el mismo corazón de Paris de acusada personalidad por su aspecto antiguo y su sugestivo silencio.
Atravesamos el puente de San Luis y entramos en la Ile de la Cite, donde, lo primero que vemos es el ábside de Notre Dame.
No entramos en la catedral de Notre Dame ya que la hábiamos visto en otras ocasiones y, ademas, la cola es de campeonato, como siempre.
Paseamos por el Quai de l'Horloge...
...y seguimos la ribera del Sena como dos veinteañeros enamorados. No en vano estamos en Paris, ciudad del amor.
Perooo, volvemos a la realidad cuando vemos lo que nos cuesta levantarnos. Sin darle más importancia, zanjamos el tema con unas cuantas carcajadas. Continuamos hasta la proa de la Ile de la Cite.
Salimos de la Ile de la Cite por el puente de San Michel hasta la plaza de dicho nombre donde, un aprendiz de Michael Jackson, está dando la tabarra.
Entramos en el barrio Latino, alcanzando la iglesia de Saint Severin
Y tambien la iglesia de Saint Julien-le Pauvre, una de las iglesias más antiguas de Paris. A la derecha de la iglesia se halla el árbol más antiguo de Paris, una robinia que fue plantada en 1601.
Desde aquí hay una bonita imagen de la catedral de Notre Dame
Caminamos por el Boulevard Saint Germain. Nos paramos en una pasteleria admirados por una enorme gorila de chocolate.
Aparte de mirar lo bien hecho que está, no nos importaria nada incarle el diente. Ñam, ñam!!
Pero, tenemos que conformarnos con una cervecita en la plaza de St. Germain des Pres
Cenamos en el barrio Latino un menu a base de mejillones, escargots, bistec, profiteroles y una botella de vino que nos cuesta más o menos unos 45 euros.
Se nos hace tarde. Queremos coger un barco para dar un paseito por el Sena. De todas las veces que he estado en Paris, nunca he podido hacer la vuelta por el Sena en barco. Esta vez, no lo perdono. Corriendo, corriendo ya que el barco sale a las 22.00 salimos del restaurante y nos vamos hacia el muelle.
Hay muchas compañias que ofrecen este servicio. Hemos escogido "Les Vedettes Du Pont-Neuf y el tiquet nos cuesta 13 por persona. Un poquito carillo pero, como os he dicho antes, esta vez no perdono.
Aunque hace bastante frio preferimos ir arriba del barco. Las fotos seran difíciles de tomar pero, a cielo descubierto, quizás tenga más posibilidades de que salga alguna cosa.
La verdad es que ver los monumentos de dia o de noche cambian un montón y, especialmente la Torre Eiffel, es una pasada de bonita.
Al llegar a la Torre Eiffel, el barco da la vuelta, pasamos por debajo de los puentes de Paris
El frio empieza a calar los huesos y acabamos el viaje en el calorcito del interior del barco. Llegamos al muelle y acabamos mi ansiado y esperado paseo por el Sena que, aunque sea una turistada, nos ha gustado muchísimo.
Pasamos por el Pont des Arts donde vemos los "candados del amor", un ritual moderno de las parejas que se juran amor eterno y lo simbolizan en un candado atado a la valla, la llave del cual, tiran al Sena, siendo el rio el guardian de su amor.
Es muy tarde y poco a poco nos vamos retirando buscando un metro que nos lleve al hotel. La estación de metro de Louvre-Rivoli esta totalmente vacia y hasta da un poco de miedo. Espero que el metro no tarde.
Respiro aliviada en cuanto me llega el viento del metro y, sobre las 12.45, llegamos al hotel despues de un emocionante dia.

LUNES, 17-10-2011

Despues de un tímido desayuno, ya que hay muy poca cosa, salimos del hotel para coger el metro línea 1 hasta la estatua de la Libertad, situada en la Isla de los Cisnes, una isla artificial situada cerca de la parada de Grenelle del metro de París.
La comunidad americana en Paris, regaló a los franceses con motivo del centenario de la Revolución Francesa, una reproducción en bronce de la Estatua de la Libertad americana. Mide 12 metros e inicialmente la situaron mirando hacia el centro de Paris pero, respetando la decisión de Bartholdi, su diseñador, le dieron la vuelta y ahora mira y saluda a su hermana americana
Nos acercamos a ver el Pont de l'Alma. Sobre la única pilastra que descansa sobre el agua se encuentra la estatua de un zuavo (nombre que se le dio a ciertos regimientos de infantería en el ejército francés a partir de la década de 1830 los cuales eran originarios de Argelia). Esta escultura es un medidor de las crecidas del Sena. Cuando las aguas del rio llegan a los pies del zuavo, se cortan las vias de las orillas. Cuando llega a los muslos de la estatua el Sena deja de ser navegable. En 1910, la crecida del Sena fue espectacular y el agua llegó hasta los hombros de la estatua.
Sobre el tunel del Puente se encuentra la llama de la Libertad, una réplica a tamaño real de la que se encuentra en America y simbolo de la amistad franco-americana. Muchos seguidores de la malograda Lady Di, muerta en accidente de tráfico en el tunel del Alma, han hecho de esta estatua un lugar de homenaje y es frecuente ver bajo los pies de la llama, flores y dedicadorias.
Volvemos a coger el metro, línea 1 hasta el Castillo de Vincennes, fortaleza construida a finales del siglo XII. El espectacular torreón fue, a lo largo de los años, residencia de monarcas y prisión de aristocratas y gente de buena posición social: Diderot, Fouquet o el marqués de Sade fueron algunos de sus ilustres prisioneros.
Frente a la torre del homenaje se alza la Sainte Chapelle, erigida por Carlos VI en 1387 y terminada por Francisco I en estilo gótico flamígero.
Volvemos hacia el metro...
...hasta La Defense, el distrito de los negocios, grandes rascacielos y oficinas. Es una zona diferente del Paris conocido pero tambien muy interesante.
Aprovechamos para comer en un McDonald's de este enorme complejo y seguidamente nos vamos hacia el hotel a recoger las maletas. No podemos entretenernos demasiado ya que el aeropuerto de Beauvais está lejos de Paris y el autobus hay que cogerlo con al menos tres horas antes de la salida del vuelo. Encontramos mucho tráfico pero vamos con tiempo. Pasamos los controles sin ningun problema y a esperar la salida del vuelo que, sin retrasos, nos trae otra vez a casa.

Como conclusión al viaje yo creo que he redescubierto la ciudad y me ha gustado. A pesar de las veces que la he visitado nunca estaba entre mis favoritas pero esta vez ha sido diferente, especial y he de deciros que ha escalado posiciones en mi lista de favoritos. Aun quedan cosas por ver de esta gran ciudad y estoy convencida de que si encuentro un vuelo interesante, economicamente hablando, seguro, seguro, habrá otra escapada a la ciudad de la luz.